Dejando a un lado aspectos burocráticos o incluso intelectuales a la hora de emprender, tenemos que comenzar conociendo nuestra preparación psicológica de manera que mediante la misma podamos establecer quienes somos, qué sabemos o cómo actuamos.
Esto es básico, pues podemos tener una visión personal demasiado positiva o incluso negativa que nos va a condicionar a la hora de enfrentarnos a situaciones de toma de decisiones.
Conocerse bien es la primera asignatura que debemos aprobar para enfrentarnos a cualquier reto.
¿Quién no se conoce así mismo?
Muchos.
Emprender es entender que TU eres tu propio líder, es decir, que vas a tener que averiguar cuales son tus debilidades, tus aptitudes, tu manera de ser y de estar en un entorno que siempre te estará observando.
¿Qué es ser un lider?
Aunque personalmente nunca me ha gustado este sustantivo, poco a poco estoy entendiendo lo que quiere decir esta palabra.
Una manera fácil de comprender liderazgo es diferenciar entre una persona que dirige y otra que lidera.
No es lo mismo.
Una persona que dirige es aquella que necesita de un reglamento, de un sistema, de unas normas que hacer cumplir. Un dirigente es este director que va señalando por donde has de caminar para llegar a unos objetivos marcados previamente.
Una persona que lidera no necesita de reglamentos, ni sistemas que tracen un camino, no está para indicar, el liderazgo enfoca una orientación pero no traza el sendero. El liderazgo ofrece alternativas varias pero la elección es siempre individual.
Orientar es la clave, y el cómo conseguir esa orientación es aprender lo que realmente crees que necesitas, bien con alguien que te lo muestre, o simplemente por tí mismo... ¡¡Evalúate !!
Siempre tienes que mejorar y esa creencia es la que va a servir para conseguir sacar el líder que todos tenemos.
Para empezar a emprender, necesitas liderar, y el principal objetivo eres tu.
Nadie puede proclamarse como un líder (otros lo hacen por ti y te etiquetan como tal).
Para llegar a serlo hay diez características comúnes que deben cumplirse y que se basan en la práctica como maneras de comportamiento y actitud.
Aplicándolas primero para contigo es la manera de poder ofrecer conocimiento a aquellos que se quieran ver como tú o que desean aprender contigo.
1) Tener iniciativa.
La más importante es la de comenzar a andar, iniciar un camino, creer en el proyecto y aprender con cada paso. Cualquier pensamiento que no implique una actuación real no sirve, ¡¡emprende actuando!!
2) Tomar decisiones
La consecuencia de la primera es esta segunda, recabar mucha información y buscar la experiencia de otros, es una buena manera de conseguir minimizar tus riesgos ya que te formarás la idea sobre cómo decidir comenzar. ¡Decide siempre! No esperes.
3) Saber escuchar - aprender
La comunicación es la clave, transmitir ideas y recibirlas es atender e intentar entender; también es muy importante conseguir hacerse uno comprender. Los consejos son siempre una parte de las lecciones, valora y encuentra diferentes posturas. ¡Búscalas!
4) La Integridad
El auto-conocimiento y una auto-evaluación parten de no escondernos ante lo que somos, y poder comprender que podemos cambiar las actitudes y ademas que estamos dispuestos a ello. La humildad es un gran valor añadido y junto con la honradez en tu comportamiento establecen la autenticidad. Entender la responsabilidad es la clave para entender que vas a ser tú siempre el culpable de todo lo que te ocurre.
5) La resiliencia
La capacidad de creer en uno mismo y en lo que emprende forma parte de una resistencia al fracaso, a la presión o a una decepción personal. Ese instinto de supervivencia debe de generar nuestra propia fuerza motriz ya que consigue poder levantarnos y comenzar de nuevo con todo lo aprendido, aplicando esa sabiduría con diferentes decisiones. Podemos equivocarnos, pero tenemos que entender y aprender de ello. Siempre hay otras perspectivas igualmente válidas, contemplar la posibilidad es siempre avanzar.
6) La confianza
Tener confianza es una labor complicada. Para ello debemos practicar la lectura con interés sobre temas asociados a tus ideas y conseguir una comunicación efectiva con otras personas que nos ayuden en nuestra idea. Esto generará el respaldo necesario para tener una gran auto-confianza que conseguirá afianzar nuestras ideas del cualquier proyecto.
7) El tiempo
Nadie puede marcarlo, ni siquiera uno mismo, el tiempo es relativo y depende de muchos factores.
Pero es importante marcar un ritmo y para ello priorizar es muy importante, establecer un calendario de objetivos es dar el valor a ese tiempo, es cuestión de constancia. Pero nada es para siempre.
8) La Gestión
A nivel personal has de aprender a gestionar tu persona, es decir, practicar lo que estás aprendiendo pues de lo contrario no va a ser efectivo, diagnosticar los conflictos con los que te encuentras y conseguir dar una solución a los mismos para poder sacar unas conclusiones te ayudará a elaborar protocolos de actuación que seguro te van a servir en un futuro. Positiviza siempre, todo tiene un motivo y si no hay solución... entonces no es un problema.
9) La responsabilidad.
Tu eres el responsable de todo lo que te ocurre, sobre todo de aquellas cosas negativas, no mires más allá de tu propia responsabilidad, las decisiones delegadas lo fueron porque tu las decidiste. Siempre eres tu.
10) Los otros.
Emprender es empezar a entender que puedes liderar tu proyecto, empezar a caminar es llevarlo a cabo.
¡Suerte!
También en ocasiones hace falta un poco de ello, pero solo te la encuentras si caminas.
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